El coordinador general d´EUiA i diputat, Jordi Miralles, ha declarat avui que l´anunci de la Unió Europea (UE) de permetre la setmana laboral de 60 hores “és una provocació”.
Miralles ha dit que “els que defensem l´Europa social estem en contra de la mesura i ens hem d´unir per a donar una resposta social i política contundent”.Per EUiA, l´actual model d´Unió Europea “retalla i limita drets de les persones” de manera constant. Dos clars exemples són la proposta d´ampliació de la setmana laboral fins a 60 hores i la directiva d´immigració. Segons Miralles, pels continus atacs a les conquestes socials, democràtiques i als drets de les persones i els pobles, “aquest model d´UE està tocat de mort”.
Per a fer front a “aquest model dretà i ultraconservador que volen imposar a Europa personatges com Berlusconi i Sarkozy”, el dirigent d´EUiA proposarà al Partit de l´Esquerra Europea (PEE) i a les forces d´esquerres representades al Parlament Europeu “posicionar-se en contra i defensar la reducció de la jornada laboral i el repartiment del treball, sobretot en un moment en què els avenços tecnològics fan que es requereixi menys ma d´obra i en que l´atur va en augment”, ha explicat.
Així mateix, Miralles creu que el govern espanyol “ha de vetar aquesta antisocial, injusta i insolidària mesura” i que “el moviment sindical ha d´organitzar una resposta europea”, que comptarà amb el suport d´EUiA.Pel ´No´ d´IrlandaD´altra banda, Miralles ha recordat que aquest dijous, 12 de juny, Irlanda és l´únic país que, pel moment, sotmetrà a referèndum el Tractat de Lisboa. En aquest sentit, el dirigent d´EUiA, formació que defensa la consulta a tots els països de la UE, espera que “el dia 12 Irlanda digui ´no´ i s´obri una nova situació a Europa”.
Rechazo de IU a la propuesta de la jornada laboral de 65 Horas
Madrid,Bruselas, 10 de junio de 2008
El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, ha tachado hoy de “escándalo inadmisible al que desde IU nos opondremos radicalmente” la ampliación de los límites de la jornada laboral aprobada la pasada madrugada por los ministros de Trabajo de la UE, tumbando la jornada laboral máxima de 48 horas existente en estos momentos.
Llamazares valora que “esta decisión vergonzosa tomada con nocturnidad y alevosía supone dar el tiro de gracia al modelo social que tanto ha costado construir en Europa, pese a las muchas carencias e imperfecciones de las que adolece. El que un empleado de cualquier sector se vea obligado a trabajar un máximo de 60 horas a la semana e, incluso, hasta 65 para colectivos determinados como el de los médicos, y que esto pueda ser negociado individualmente por el empresario, es el mayor ataque a los trabajadores en décadas. Niega la propia historia política y social seguida hasta ahora por la Unión Europea".
El máximo dirigente de IU señala que “los gobiernos europeos, capitaneados por los reaccionarios ministros de la derecha hacen que Europa se niegue a sí misma niegue las luchas de los trabajadores del siglo XX y volvamos a la Europa del siglo XIX en la que primaba los beneficios empresariales a costa de la explotación de la mano de obra”. Gaspar Llamazares adelantó que IU “no reparará en esfuerzos, iniciativas y movilizaciones para frenar la vuelta de tuerca neoliberal neoliberal y ultraconservadora que se nos viene encima".
Al tiempo, exigió al Gobierno socialista de Rodríguez Zapatero que “se ponga en contacto de inmediato con los sindicatos, los agentes sociales y con todas las organizaciones que tengan algo que decir y demuestre que representa a una formación progresista empezando a elaborar una posición crítica y alternativa que vaya más allá de las declaraciones más o menos grandilocuentes de algunos dirigentes socialistas”.Meyer: Los ministros de trabajo de la UE han dado luz verde esta madrugada a un texto que revisa la Directiva que regula el tiempo de trabajo. Entre otras medidas, este texto permitiría ampliar la jornada laboral a 60 horas semanales e incluso a 65 para sectores como el sanitario o los servicios de emergencia.
El eurodiputado de Izquierda Unida Willy Meyer ha calificado este texto como "aberrante" y como "el mayor ataque a los derechos laborales en la historia de Europa". Según el eurodiputado "esta propuesta supone una grave involución de los logros conseguidos gracias a la clase obrera que se ven reflejadas en los principios de la OIT." Esta discusión, que estaba paralizada desde 2004 a causa de la posición de España, Chipre, Italia y Francia ha sido posible gracias a las victorias de Sarkozy y Berlusconi, que ahora se han hecho decantar la balanza. En opinión de Meyer "la propuesta ha salido ahora adelante para avalar el incumplimiento que ya está ocurriendo en muchos países en cuanto al tiempo máximo de jornada laboral en sectores como el sanitario o el de transporte".Una de las medidas más polémicas es el incremento de la jornada laboral a 60 horas e incluso a 65 horas semanales para los trabajadores de los servicios sanitarios y de emergencia., estipulando un periodo de referencia de 12 meses para el cálculo de la media de horas laborales. A este respecto Willy Meyer ha constatado que: "cuanto mayor es el periodo, mayor es el riesgo de que los trabajadores se vean sometidos a jornadas laborales abusivas." La Directiva introduce además la "cláusula opt-out" según la cual el empresario y el trabajador podrían acordar un incremento de la jornada laboral.
Para Meyer esta cláusula "profundiza la precarización en el empleo y consolida la individualización de las relaciones laborales." Otra de las modificaciones que se ha aprobado modificar es la relativa al concepto de tiempo de trabajo. Como ha explicado Meyer: "la Directiva pretende no considerar como tiempo de trabajo los periodos que, aún permaneciendo en el lugar de trabajo, o estando requeridos, los trabajadores no estén realizando un trabajo efectivo: hablamos por ejemplo de las guardias médicas."
En definitiva, para Meyer esta propuesta de Directiva supone un grave ataque a los derechos de los trabajadores y demuestra la orientación que está tomando la Unión Europea más preocupada por garantizar los beneficios de las empresas que de proteger el Estado social: una Europa donde gana el mercado y pierde el ciudadano." Willy Meyer ha llamado a la movilización y la contestación por parte de los trabajadores a estas medidas, y ha anunciado que el Grupo de la Izquierda Unitaria iniciará cuantas medidas sean necesarias, junto con los sindicatos europeos para combatir este grave ataque a los derechos laborales.